Petroquímica
Fiabilidad de primera clase y rápida puesta en marcha mediante RCM y formación específica
Fiabilidad de categoría mundial en acción
Cómo unas estrategias de mantenimiento específicas y una formación sólida impulsaron la excelencia operativa sostenible
- Consiguió una fiabilidad de categoría mundial con RCM y gestión de activos, convirtiéndose en el centro de referencia norteamericano.
- Estableció prácticas de cuidado de activos en una nueva planta, alcanzando la plena operatividad en 3 meses.
- Formó al personal en planificación, programación y claridad de funciones para reducir la dependencia de las personas y mantener un alto rendimiento a pesar de la rotación.
En el sector petroquímico, la fiabilidad no es sólo un punto de referencia, sino un poderoso factor diferenciador. Una planta, deseosa de superar los estándares del sector, aplicó estrategias de mantenimiento centrado en la fiabilidad (RCM) y de gestión integral de activos para alcanzar una fiabilidad de primer orden. Sus esfuerzos no sólo transformaron las operaciones diarias, sino que les valieron la distinción de servir como punto de referencia norteamericano para un rendimiento de mantenimiento de primer nivel dentro de su gran organización.
Establecimos el estándar de fiabilidad de categoría mundial, alcanzando la plena producción en sólo tres meses en una nueva planta.
Esta cultura de excelencia se extendió también a las nuevas empresas. Cuando la empresa puso en marcha una planta más pequeña, un programa de cuidado de activos meticulosamente diseñado garantizó que la nueva instalación alcanzara y mantuviera su pleno rendimiento operativo en sólo tres meses. Esta rápida puesta en marcha puso de relieve el valor de la planificación proactiva, la toma de decisiones basada en datos y la formación exhaustiva, factores que sientan las bases para la estabilidad y la eficiencia a largo plazo.
¿Listo para lograr resultados que superen sus expectativas?
La creación de capacidad interna fue clave para mantener estos logros. Mediante la formación del personal en planificación y programación eficaces y la definición clara de funciones y responsabilidades, la planta se hizo más resistente frente a la elevada rotación de personal. En lugar de depender de unas pocas personas clave, la planta estableció mapas de procesos y flujos de trabajo estandarizados que mantuvieron la coherencia del rendimiento, independientemente de quién estuviera de turno. El resultado fue una operación petroquímica que no sólo alcanzó una fiabilidad de categoría mundial, sino que también se aseguró una plataforma para la mejora continua y la adaptabilidad.